Me agrada este blog llamado “Educando en armonía” por su carácter social además de educativo. En todas su páginas reza:

¡OTRA EDUCACIÓN ES POSIBLE...Y URGENTEMENTE NECESARIA!,

Sus últimos artículos hacen de este slogan una verdadera conclusión. Cuentan cómo por fin ha llegado la paz al campo de Socuéllamos tras la desaparición de los inmigrantes que “sobraban” y las reacciones insolidarias de los vecinos.

En ocasiones determinados artículos hacen que uno se quede durante un buen rato pegado al monitor, mientras acuden todas esas ideas que lleva en mente durante un tiempo y por fin han encontrado un medio de desahogo. En este caso se trata de racismo selectivo. Y digo selectivo porque los jeques árabes no suelen ser víctimas de racismo. Se trata de rechazo a la pobreza. La misma pobreza que nos incomoda, como lo hace la enfermedad, la imperfección o la verdad. La repulsa hacia la pobreza del blanco es mucho mayor cuando se trata del árabe o el sudamericano.

Sorprendido escucho con frecuencia frases hechas que transmiten falsas ideas. Estas corren por mi barrio y mi ciudad en boca personas de toda edad. En otras ocasiones puedo no haber dicho toda la verdad, pero juro que lo que viene a continuación es totalmente cierto y lo he oído en más de una ocasión:

“Ese colegio es bueno. Por fortuna todavía cuenta con pocos inmigrantes en sus aulas”

“¡No sabes la cantidad de enfermedades que traen los inmigrantes de sus paises de origen”

“Los moros vienen con la intención oculta de recuperar Al-Andalus. ¡Y nosotros tan tranquilos!”

Haremos un flaco favor a los jóvenes difundiendo estas ideas si pretendemos prepararlos adecuadamente para la vida. En un futuro próximo encontraran frente a ellos de forma ineludible a un compañero, un pretendiente enamorado, un jefe, un médico o un juez de distinto origen racial. Para eso hay que estar preparado.